Acogemos con satisfacción la decisión de ETA de renunciar definitivamente a la violencia.
Es una buena noticia que hayamos conseguido que ETA haya renunciado por fin a imponer su proyecto político a través de la muerte, el miedo, la violencia y la exclusión.
Después de haber causado tanto sufrimiento y dolor a tantas personas inocentes es una buena noticia saber que ETA dice que no volverá a atentar contra la vida, los derechos y la libertad de las personas.
Consideramos que este es un paso muy importante, pero la tranquilidad de los españoles sólo será completa cuando se produzca la disolución irreversible de ETA y su completo desmantelamiento.
Hoy nuestro primer pensamiento ha de ser para todas esas personas inocentes cuyas vidas quedaron destruidas. Su sufrimiento ha sido el sufrimiento de todos los españoles de bien.
Las víctimas del terrorismo son y seguirán siendo el referente moral de nuestra democracia. Nunca perdieron la confianza en los instrumentos de nuestro Estado de Derecho: la ley, la justicia y las fuerzas de seguridad. Gracias a eso hoy podemos recibir esta noticia.
Quiero reconocer hoy muy especialmente la labor de todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Han ofrecido un enorme tributo de sangre y han actuado con una eficacia ejemplarmente democrática.
Junto a ellos, quiero agradecer la labor decisiva que han desarrollado jueces y fiscales en la lucha contra la banda terrorista. Esta noticia se ha producido porque la ley, la expresión de la libre voluntad de los españoles, ha sido más fuerte que las amenazas y la violencia. En esa lucha, los jueces y fiscales encargados de la aplicación de la ley han sido determinantes.
Como les he dicho, el anuncio de la desaparición de la violencia de ETA de la vida de los españoles es una buena noticia. Es el fruto de esfuerzo y de la determinación del conjunto de la sociedad española que ha sabido resistir de manera ejemplar el chantaje criminal de los terroristas durante décadas, que ha sabido mantenerse unida, que ha sabido defender su libertad y que hoy es más libre porque este anuncio se ha producido sin ningún tipo de concesión política.
A ETA la derrota la fortaleza del Estado de Derecho y la fe en la democracia de todos los españoles, representada por el esfuerzo sucesivo de todos los gobiernos que han actuado bajo el amparo de la ley. Y ese es el único camino de futuro.